El 14 de marzo se celebra el Día Mundial del Riñón 2019 bajo el lema «salud renal para todos en todos lados”
Las administraciones sanitarias, hospitales y asociaciones de enfermos renales informarán en esta jornada a través de sus puntos de información, jornadas o folletos de las acciones que se llevarán a cabo en las ciudades españolas para dar a conocer cómo prevenir la enfermedad renal y la detección precoz.
Riñones sanos.
No en vano, la Sociedad Española de Nefrología advierte de la necesidad de » aumentar la sensibilización social en torno a la salud renal, relacionada estrechamente con la salud cardiovascular, y también por su fuerte impacto en la calidad de vida». Proponemos cinco consejos para mantener los riñones sanos:
1. Alimentación renal saludable
Es necesario fomentar hábitos de vida saludables para el cuidado de los riñones; una adecuada alimentación es fundamental, en la que no puede faltar las verduras dos veces al día y las frutas, tres veces al día. Al contrario de lo que se piensa, no hay que evitar el pan, pastas o arroces y siempre, usar aceite de oliva. En cuanto al consumo de proteínas a diario, lo saludable es que sean de origen variado alternando las del pescado blanco o azul, con huevos y legumbres. La leche, mejor semidesnatada.
2. Controlar el peso
La Sociedad Española de Nefrología recomienda una hora de ejercicio diaria para mantener nuestro cuerpo en forma y evitar el sobrepeso. Controlar los kilos puede ayudar a prevenir la diabetes, enfermedades cardíacas y otras condiciones asociadas con la enfermedad renal.
3. Hidratación adecuada
El consumo moderado de agua, (4 a 6 vasos al día) es lo ideal para mantener la salud de nuestros riñones. También moderar la ingesta de bebidas gaseosas y alcohólicas, y así reducir el riesgo de deterioro de la función renal.
4. Controlar los factores de riesgo
Hay ciertas enfermedades, como la diabetes y la hipertensión, que son factores de riesgo de la Enfermedad Renal Crónica. Por eso, la Sociedad Española de Nefrología recomienda controlar la función renal con una analítica anual, especialmente si se tienen más de 65 años o se padece alguna de estas dos enfermedades crónicas; también si se tienen antecedentes familiares de insuficiencia renal.
5. No fumar
El tabaco es un factor de riesgo cardiovascular, y el riñón es un órgano cardiovascular, por lo que también está afectado. Los especialistas opinan que el tabaquismo debería incluirse como un factor de riesgo de trastornos en el riñón y de la necesidad de informar a la población sobre este riesgo. [F]
Por: Diario de Sevilla.es