Si continuamos al ritmo actual con emisiones de gases de efecto invernadero, ese límite se elevará en las próximas décadas con consecuencias drásticas e irreparables para el planeta como la subida del nivel del mar, la acidificación de los océanos, la frecuencia e intensidad de olas de calor, sequías o precipitaciones, sobre todo impactos en la biodiversidad y los ecosistemas. En este contexto mundial, se hace necesario tomar conciencia y empezar a actuar ya, tomando medidas sostenibles.
La energía generada a partir de combustibles fósiles es una de las principales responsables de las emisiones; por lo queuna estrategia sería cambiar, al menos en parte,el tipo de energía actual que consumimos, por otras renovablese inagotables, como la solar, la eólica o del viento, la hidráulica. Se necesita tomar medidas a nivel mundial, para mitigar las emisiones de carbono y una manera de lograrlo sería impulsando las energías limpias.
La luz del sol puede aprovecharse para generar energía limpia captándola y transformando con paneles solares; estos paneles son capaces de convertir la radiación del sol en electricidad, gracias al efecto fotovoltaico, mediante multitud de celdas que se estimulan y hacen que la luz solar se convierta energía.
En la actualidad, la energía solar fotovoltaica se considera la fuente de electricidad más barata, y la de mayor potencial en los próximos años, por lo que grandes consumidores de energía como las ciudades, las industrias, hoteles y comercios podrían marcar la diferencia a nivel de emisiones y mejorar su rentabilidad al instalar paneles solares en sus empresas.
La energía eólica utiliza la fuerza del viento para transformar en energía mecánica gracias al movimiento de rotación que producen las aspas del molino de viento; esta energía mecánica se convierte en energía eléctrica gracias a un generador que funciona con una turbina de imanes para crear el voltaje eléctrico, que resulta una forma de energía inagotable y renovable.
Por otro lado, las caídas de agua permiten generar electricidad, es decir, utiliza el agua en movimiento para generar electricidad. La energía hidráulica es un tipo de energía totalmente ecológica ya que es limpia y no produce emisiones tóxicas. El agua que cae pasa por unas turbinas que se acoplan a un generador. Estas turbinas convierten el movimiento en energía mecánica. El generador tiene como función transformar la energía mecánica en energía eléctrica. El propio movimiento del agua hace girar una turbina, que está conectada a un transformador que produce la energía eléctrica.
Nuestro país tiene el privilegio de disponer 12 horas de sol, también tenemos fuertes vientos en las playas del litoral y en los páramos. Caídas de agua a lo largo del Callejón Interandino, de modo que disponemos de las mejores posibilidades para utilizar las energías renovables, como alternativas que benefician el cuidado del planeta y que impactan positivamente en su economía. Exigir