LUIS REINOSO GARZON
La ciencia nos informa que a medida que invadimos los ecosistemas forestales, destruimos los hogares de las especies, manipulamos las plantas y los animales para obtener beneficios, creamos las condiciones para nuevas epidemias de enfermedades. En los últimos 50 años, han surgido hasta 300 nuevos patógenos. Cuando hacinamos a los animales domésticos en granjas industriales para maximizar las ganancias, han aparecido nuevas enfermedades como la gripe porcina y la gripe aviar que se propagan rápidamente. La agricultura industrial intensiva con el uso de agrotóxicos y los sistemas alimentarios industriales dan lugar a enfermedades crónicas no transmisibles como: malformaciones, cáncer, alteraciones endocrinas, diabetes, problemas neurológicos e infertilidad. Con las infecciones de Covid-19, la morbilidad aumenta dramáticamente con estas condiciones preexistentes. En el Día de La Tierra, estamos advertidos que violamos los derechos de nuestra madre Tierra y de todas sus especies por nuestra cuenta y riesgo, y que es urgente aplicar los conocimientos y la sabiduría ancestral de los pueblos originarios, guardianes de la Tierra a lo largo de los tiempos.
Cuando utilizamos venenos, como insecticidas, herbicidas para matar insectos y plantas en el modelo industrial de la agricultura, contaminamos el agua, el suelo, el aire, y destruimos la biodiversidad; hasta convertir en desiertos; estos pesticidas están llevando a la extinción de las especies, incluyendo a los agentes polinizadores, como el caso de las abejas; cuando hacemos minería a cielo abierto utilizamos millones de litros de agua que es esencial para la vida humana y la naturaleza; cuando quemamos petróleo y carbono mineral que la tierra ha fosilizado durante 600 millones de años, hemos causado el desastre planetario. Al industrializar y globalizar nuestros sistemas alimentarios contribuimos a la producción de los gases de efecto invernadero y por lo tanto al cambio del clima.
Esta pandemia no es un desastre natural, al igual que la crisis de la extinción de especies y las alteraciones climáticas no son desastres naturales. Las epidemias de enfermedades emergentes son causadas por actividades humanas. La emergencia sanitaria a la que nos enfrentamos como comunidad mundial está relacionada con la emergencia sanitaria a la que se enfrenta el Planeta. El 22 de abril, Dia Mundial de la Madre Tierra nos ha enviado un diminuto virus invisible para ayudarnos a dar un salto cuántico y crear una nueva civilización planetaria y ecológica basada en la armonía con la naturaleza.